sábado, 3 de julio de 2010

Juguemos a usar nuestra imaginación

Esta entrada es una tarea de la certificación, pero antes de empezar a echar rollo quisiera que ustedes, queridos lectores, supieran de qué trata.

Primero observemos la articulación de la cadera, al mismo tiempo imaginemos los movimientos que hace la pierna, siendo el fémur el hueso correspondiente al de la pierna. Se mueve al frente, atrás, a los lados, en círculo. Aquí lo importante es que intentes explorar tu cuerpo al hacer los movimientos.



Ya que usamos nuestra imaginación y nuestro sentido de propiocepción (ese que nos dice cómo van las cosas hacía dentro de nosotros) vayamos a hacer nuestra imagen. Imaginemos ahora que entre el fémur y la cadera, entre ambos huesos tenemos jabonosa, resbalosa o llena de aceite lubricante la articulación. Es muy importante que no le tengas miedo a usar tu imaginación, hazlo; ¿qué sientes al imaginar la superficie resbalosa? ¿Qué partes de tu cuerpo están relajadas, qué sensaciones experimentas al interior de la cadera? ¿Cómo te imaginas que puedes estar caminando?

Mi experiencia en cuanto a la sensación fué el caminar sobre hielo. El no tener fricción en la  cadera hace que los abdominales y cuadríceps se relajen y poder caminar más usando el psoas.





Al momento de estar haciendo la visualización empecé con una sola pierna, la diferencia al caminar fué muy marcada. De un lado me sentía fluido ligero, sin trabajo que hacer para "deslizarme"; del otro lado se sentía el trabajo en las piernas, glúteos y hasta cierta fricción en la articulación.

Está en ti el experimentarlo y sentir la diferencia, después de eso es tu decisión el modificar tus hábitos de movimiento.


Fuentes:
http://www.juntadeandalucia.es/averroes/~29701428/salud/cadera.gif

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